Libertad y Poder

Si la Grandeza es un recurso al alcance de toda persona, empresa y equipo, ¿Por qué no la desarrollamos? ¿Qué es lo que nos detiene? ¿Existe acaso una fuerza externa que nos impide crecer? ¿O será, tal vez, sólo una falta de ejercitación? ¿Habrá cuestiones internas, de la persona u organización, que nos condicionan a la mediocridad?

Es muy significativo que la mayoría de las personas se sienten agobiadas y extenuadas por las presiones y urgencias de las circunstancias. Tanto a nivel personal como profesional. Al mismo tiempo, estas personas sienten también que tienen más recursos que ofrecer de los que ponen en juego, sienten que pueden dar mucho más de lo que están dando. Esto parecería contradictorio, pero no lo es.

El problema es la falta de acción efectiva. Desarrollamos una alta actividad, pero una muy baja acción efectiva. Dedicamos gran parte de nuestro tiempo a atender asuntos urgentes, pero poco importantes. Dedicamos una gran energía a resolver conflictos intrascendentes y a lidiar con emociones que no nos conducen a ningún lado. En síntesis, desperdiciamos tiempo, energía y esfuerzos... terminamos cansados y estresados... y con pobres resultados.

Otro dato interesante a tener en cuenta es que una persona normal tiene, en un día común, aproximadamente 60.000 pensamientos. Cerca de un pensamiento por segundo !!! El inconveniente es que el 99 por ciento de esos pensamientos son los mismos que los del día anterior. Esta reiteración diaria de pensamientos crean una prisión mental, que nos encierra y nos limita. Una prisión que muchas veces no vemos y a la cual estamos habituados.

Otro obstáculo, entonces, es la falta de pensamiento efectivo. Vivimos con desnutrición mental crónica, en un círculo vicioso de pensamientos improductivos. Pensamientos dedicados a nuestras preocupaciones, pensamientos que surgen de la nostalgia de tiempos pasados, o que especulan sobre situaciones futuras poco probables. Pensamientos que crean conflicto, amargura, frustración, resignación. Pensamientos limitados por una prisión que no vemos... o negamos.

Esta rutina de acciones y pensamientos genera un estado emocional de falta de motivación... Y es justamente la motivación la que nos proporciona la energía para avanzar y lograr resultados grandiosos. En vez de motivación, las emociones reinantes tienen que ver con resignación, resentimiento, frustración y miedo... emociones que nos encadenan a un estado de inacción, baja autoestima y malestar.

La siguiente dificultad tiene que ver, por lo tanto, con la falta de emociones efectivas. Y éste es justamente un problema por nuestra ignorancia e incapacidad para intervenir en nuestro mundo emocional. Quedamos atrapados en nuestras emociones por falta de inteligencia emocional. Y en vez de intervenir efectivamente en las emociones, las negamos, las rechazamos, las ignoramos, las reprimimos. En definitiva, en vez de solucionar el problema, lo agrandamos y creamos nuevos problemas.

Finalmente llegamos a la supuesta causa de todos los males: el contexto. El contexto tiene que ver con la cultura en la cual nos movemos, la globalización, los políticos, las crisis económicas, los jefes, los empleados, la competencia, etc. etc. O sea, todo lo que esta fuera de mí, o de nosotros. El verdadero problema no es el contexto.

El problema surge por la falta de efectividad en nuestra relación con el contexto. En principio, nuestra falta de visión para ver oportunidades en los contextos en los que nos movemos. Al desarrollar una visión más aguda, podemos ver posibilidades y oportunidades hasta en los peores escenarios. El otro inconveniente surge al focalizarnos en cómo nos condiciona el contexto, y no darnos cuenta de las posibilidades y el poder que tenemos de cambiar ese contexto.

Resumiendo, podemos ver 4 obstáculos para el logro de resultados grandiosos:
1-Pensamientos inefectivos
2-Acciones inefectivas
3-Emociones inefectivas
4-Relación con el contexto inefectiva.

Es en esta interrelación de pensamientos, acciones, emociones y relación con el contexto donde generamos la Grandeza... o la mediocridad. Y como esta interrelación es sistémica, podemos intervenir en cualquiera de los 4 aspectos para lograr una cambio total, una transformación desde lo ordinario hacia lo extraordinario.

La clave de esta transformación está en 2 palabras: Libertad y Poder.

Comúnmente se entiende por libertad el hacer lo que uno quiere. En todo caso ésta podría ser una definición de libertad caprichosa e irresponsable. También se dice que la libertad de uno termina donde comienzan los derechos del otro. Sin negar esta afirmación, podríamos complementarla diciendo que:

* La Libertad de uno termina donde termina su poder de pensamiento y acción.
* Los derechos de uno terminan donde termina su poder de ejercerlos.

De esta manera podríamos definir la Libertad como la capacidad responsable de hacer lo necesario para lograr aquellas cosas que nos importan, respetando los valores y el contexto. La libertad del pensamiento amplía nuestros horizontes y genera la motivación y el poder de actuar y relacionarnos efectivamente.

La Libertad, el Poder, la Responsabilidad son los grandes generadores de Grandeza. Desarrolla tu Libertad, incrementa tu Poder, fortalece tu Responsabilidad, y tu Grandeza crecerá... naturalmente

Tú estás invitado a recorrer juntos este camino... Te estaré acompañando para desarrollar tu grandeza, éxito y felicidad...

Te saludo
Pablo Buol

Formación Profesional

Es un Programa para el Desarrollo Personal y Aprendizaje de Coaching como herramienta Profesional.

Dentro de este espacio de aprendizaje de Coaching que proponemos, nos referimos a una disciplina práctica que facilita el aprender a: Observar, Pensar, Sentir, y Hacer de formas diferentes, por consiguiente lograr diferentes Resultados en la Vida. Para personas que trabajan con Grupos, les servirá como poderosa herramienta para intervenir y expandir los límites del Equipo y las Personas.

Asimismo sirve para orientarse profesionalmente. Es un espacio de re-conexión tanto con nosotros mismos como con nuestras relaciones. Abre la posibilidad de incrementar nuestro poder de acción y capacidad de cambios, para dejar atrás aquellas creencias y miedos que nos frenan y producen sufrimientos.

Es un apasionante desafío para concretar nuestros propósitos fundamentales y encontrarle un sentido trascendente a Nuestra Propia Vida.

Es un camino de Aprendizaje para Hacer con Placer y Con-Vivir en Bien-Estar.

Coordinado personalmente por Pablo Buol, Fundador y Director Internacional de Cocrear. Este programa cuenta con el aval de la Federación LatinoAmericana de Profesionales en Coaching Ontológico.

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